El Social Trading ha creado como una especie de red social en los mercados para copiar las operaciones de otros traders, pero ¿es bueno o malo?
Con esto no quiere imponer si es positivo o negativo unirse a estas redes sociales de inversión, sino bajar una visión acerca del tema.
El Social Trading, como lo dice el nombre, es una red social en la que encuentras a traders profesionales o novatos que exponen sus ideas y cuentas de inversión para que, al igual que fuera Twitter, conseguir seguidores y mostrar lo buenos que somos en los mercados financieros.
En si el concepto es bueno porque nos permite encontrar millones de ideas al momento de invertir en diversos activos fiancieros y si somos novatos nos puede facilitar incluso las ganancias, si las operaciones que realizamos nos dan las ganancias que nos proponen en el análisis claro está.
Pero como sabemos, en las redes sociales encontramos de todo y esta no es la excepción.
La mayoría de estas plataformas te ofrecen ver el perfil completo de a quienes seguimos con un reporte de la cuenta real para evaluar si realmente son tan buenos como dicen. Aunque sabemos que ni una racha perdedora signifca que un trader es malo, ni una racha ganadora significa que encontramos el santo grial del trading.
Esto por un lado está buenísimo pero no podríamos estar navegando horas y horas entre los usuarios para ver cual es el que más se adapta a nosotros, sino buscar aquellos que tengan una buena rentabilidad en sus cuentas. Ojo, eso no signifca que vaya a ganar siempre pero si nos habla del buen hacer del trader.
Por otro lado y para no fiarnos totalmente de alguien, siempre es necesario que realicemos nuestros propios análisis. Ya sea te estés iniciando o tengas experiencia, es recomendable que tengas una segunda opinión además de que ganarás conocimientos y experiencia en el día a día para poder ser un Social Trader de referencia.
El Social Trading no es bueno ni malo, sino que debemos andar con cuidado y ahondar en toda la información disponible para no perder tu dinero ni seguir a un vende humo.