El par EUR/USD revirtió las ganancias del miércoles y cayó hacia los mínimos semanales cuando un ataque de aversión al riesgo detuvo el repunte impulsado por la decisión de la Fed. El par cayó desde un máximo de 1.0641 a un mínimo de 1.0492 antes de estabilizarse en los 1.0550.
El miércoles, la Reserva Federal decidió aumentar el rango de tasas de los fondos federales en 50 pb a 0,75%-1,00%, el mayor aumento en 22 años. En la conferencia de prensa, el presidente Powell confirmó que el ajuste cuantitativo, que reducirá el tamaño del balance, comenzará en junio, aunque a un ritmo más lento de lo esperado por los analistas. Powell también descartó un aumento de 75 pb y en su lugar señaló dos, no cuatro, aumentos de 50 pb en las próximas reuniones.
El mensaje "no tan hawkish" puso al dólar bajo presión y provocó que las acciones se dispararan. Sin embargo, todo cambió el jueves después de que el Banco de Inglaterra advirtiera que la economía del Reino Unido podría entrar en recesión este año.
El BoE desencadenó la aversión al riesgo en los mercados financieros, lo que impulsó los rendimientos de EE.UU. y al dólar al tiempo que presionó sobre los activos de mayor riesgo. El rendimiento de la nota a 10 años alcanzó su nivel más alto desde el 2018 en 3,106%, mientras que el DXY alcanzó un nuevo máximo marginal en 103.94.
En cuanto al EUR/USD, el par dio un giro en U y volvió a caer por debajo de 1.0500 antes de recuperarse ligeramente. La perspectiva técnica a corto plazo sigue siendo bajista según el gráfico diario. El RSI ha virado al sur después de corregir las condiciones de sobreventa, mientras que el MACD se mantiene en territorio negativo, aunque refleja la pérdida del impulso vendedor.
El nivel de soporte inmediato ahora se ve en los mínimos semanales alrededor de 1.0490, seguido por el mínimo de cinco años registrado en 1.0470 la semana pasada. Un quiebre por debajo de este nivel podría allanar el camino hacia 1.0400 en camino a los mínimos de 2017 en 1.0340.
Por otro lado, el EUR/USD necesita un cierre por encima de la media de 20 días, actualmente en 1.0710, para aliviar la presión inmediata e intentar un repunte hacia 1.0800.
El miércoles, la Reserva Federal decidió aumentar el rango de tasas de los fondos federales en 50 pb a 0,75%-1,00%, el mayor aumento en 22 años. En la conferencia de prensa, el presidente Powell confirmó que el ajuste cuantitativo, que reducirá el tamaño del balance, comenzará en junio, aunque a un ritmo más lento de lo esperado por los analistas. Powell también descartó un aumento de 75 pb y en su lugar señaló dos, no cuatro, aumentos de 50 pb en las próximas reuniones.
El mensaje "no tan hawkish" puso al dólar bajo presión y provocó que las acciones se dispararan. Sin embargo, todo cambió el jueves después de que el Banco de Inglaterra advirtiera que la economía del Reino Unido podría entrar en recesión este año.
El BoE desencadenó la aversión al riesgo en los mercados financieros, lo que impulsó los rendimientos de EE.UU. y al dólar al tiempo que presionó sobre los activos de mayor riesgo. El rendimiento de la nota a 10 años alcanzó su nivel más alto desde el 2018 en 3,106%, mientras que el DXY alcanzó un nuevo máximo marginal en 103.94.
En cuanto al EUR/USD, el par dio un giro en U y volvió a caer por debajo de 1.0500 antes de recuperarse ligeramente. La perspectiva técnica a corto plazo sigue siendo bajista según el gráfico diario. El RSI ha virado al sur después de corregir las condiciones de sobreventa, mientras que el MACD se mantiene en territorio negativo, aunque refleja la pérdida del impulso vendedor.
El nivel de soporte inmediato ahora se ve en los mínimos semanales alrededor de 1.0490, seguido por el mínimo de cinco años registrado en 1.0470 la semana pasada. Un quiebre por debajo de este nivel podría allanar el camino hacia 1.0400 en camino a los mínimos de 2017 en 1.0340.
Por otro lado, el EUR/USD necesita un cierre por encima de la media de 20 días, actualmente en 1.0710, para aliviar la presión inmediata e intentar un repunte hacia 1.0800.