DXY consigue cierre semanal sobre 90 pero mantiene sesgo bajista
El dólar estadounidense avanzó considerablemente el viernes, impulsado principalmente por los datos de inflación de Estados Unidos y en menor medida por los flujos de fin de mes y la suba de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
El índice dólar (DXY) que pondera el valor del billete verde frente a una canasta de divisas, avanzó hasta un máximo de dos semanas en 90.44 como reacción inmediata a los datos de inflación medidos por el PCE, dato seguido de cerca por la Reserva Federal. El índice de precios del PCE de abril registró una suba del 3,6% interanual, y el índice subyacente del 3,6%, la lectura más alta desde 1994.
Sin embargo, el DXY retrocedió casi tan rápidamente como subió, recortando la mayor parte del rally diario. Aun así, el índice cerro la semana justo sobre el nivel psicológico de 90.00, consiguiendo una mínima ganancia diaria y semanal.
A pesar del repunte del viernes, la perspectiva técnica del DXY se mantiene sesgada a la baja, tanto en el gráfico diario como en el semanal, aunque más clara en este último, con los indicadores en territorio negativo y ganando pendiente bajista, mientras que el precio opera bajo sus principales medias móviles.
El cierre semanal sobre 90.00 podría favorecer una recuperación más pronunciada, aunque aún limitada. El nivel de resistencia inmediato se observa en el máximo del viernes en 90.44, seguido por los máximos del 13 y 14 de mayo en el rango 90.80-90. Finalmente, la media de 100 días en 91.10 debería limitar los intentos alcistas de corto plazo.
Por otro lado, el mínimo de cuatro meses registrado el 25 de mayo en 89.53 es el nivel de soporte significativo de corto plazo, seguido por el mínimo del 2021 registrado en 89.20 en enero. Un quiebre de este último podría allanar el camino hacia el mínimo de marzo de 2018 en 88.94.
El índice dólar (DXY) que pondera el valor del billete verde frente a una canasta de divisas, avanzó hasta un máximo de dos semanas en 90.44 como reacción inmediata a los datos de inflación medidos por el PCE, dato seguido de cerca por la Reserva Federal. El índice de precios del PCE de abril registró una suba del 3,6% interanual, y el índice subyacente del 3,6%, la lectura más alta desde 1994.
Sin embargo, el DXY retrocedió casi tan rápidamente como subió, recortando la mayor parte del rally diario. Aun así, el índice cerro la semana justo sobre el nivel psicológico de 90.00, consiguiendo una mínima ganancia diaria y semanal.
A pesar del repunte del viernes, la perspectiva técnica del DXY se mantiene sesgada a la baja, tanto en el gráfico diario como en el semanal, aunque más clara en este último, con los indicadores en territorio negativo y ganando pendiente bajista, mientras que el precio opera bajo sus principales medias móviles.
El cierre semanal sobre 90.00 podría favorecer una recuperación más pronunciada, aunque aún limitada. El nivel de resistencia inmediato se observa en el máximo del viernes en 90.44, seguido por los máximos del 13 y 14 de mayo en el rango 90.80-90. Finalmente, la media de 100 días en 91.10 debería limitar los intentos alcistas de corto plazo.
Por otro lado, el mínimo de cuatro meses registrado el 25 de mayo en 89.53 es el nivel de soporte significativo de corto plazo, seguido por el mínimo del 2021 registrado en 89.20 en enero. Un quiebre de este último podría allanar el camino hacia el mínimo de marzo de 2018 en 88.94.