Plata haciendo historia: brilla más que el oro
La plata volvió a robarse todas las miradas en los mercados. El metal blanco no sólo está en modo rally, sino que acaba de marcar máximos históricos en los 51 dólares por onza, impulsado por una combinación de demanda industrial, refugio financiero y un dólar que sigue perdiendo fuerza.
Durante las últimas semanas, la plata se transformó en la estrella del sector de metales preciosos, superando incluso al oro en términos de rendimiento. La expectativa de que la Reserva Federal recorte las tasas en los próximos meses está incentivando a los inversores a refugiarse en activos reales, y la plata, con su doble rol de metal industrial y de inversión, está siendo uno de los principales beneficiados.
Por el lado fundamental, la demanda industrial sigue firme, especialmente desde sectores como la energía solar, la electrónica y los vehículos eléctricos. A eso se le suma un déficit estructural de oferta: la producción minera no logra acompañar el ritmo del consumo global, y los inventarios en los mercados físicos están en mínimos de varios años.
Desde lo técnico, el movimiento ha sido contundente. La plata rompió resistencias clave y consolidó un impulso alcista sólido, con un soporte inmediato en la zona de 47,68 dólares por onza.
Mientras ese nivel se mantenga firme, los objetivos se proyectan hacia los 51,08 dólares y posteriormente hacia los 56 dólares, donde podríamos ver una toma de beneficios más importante.
