Encrucijada en los mercados: Yields fuertes + melt-up del S&P500Los mercados financieros se encuentran en una coyuntura crítica. En las últimas semanas, los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años TVC:US10Y han experimentado un aumento drástico, pasando del 3.6% al 4% en menos de un mes.
Este salto ha desatado preocupaciones entre los inversionistas, evocando recuerdos de crisis pasadas donde los aumentos rápidos de tipos de interés llevaron a caídas pronunciadas en los mercados bursátiles. Al mismo tiempo, el S&P 500 CBOE:SPX ha registrado una subida notable del 40% desde octubre de 2023, un fenómeno conocido como “melt-up”, que muchos comparan con los exuberantes mercados de 1999 y 1929, momentos que terminaron en fuertes correcciones.
Lecciones del Pasado: Los Años 70 y la Crisis Actual
Para entender el posible desenlace de la actual subida de los tipos de interés, es útil remontarse a la década de 1970.
Entre 1972 y 1975, los tipos de interés en EE.UU. se dispararon debido a la crisis del petróleo desencadenada por la guerra de Yom Kipur y el embargo petrolero árabe. Este evento provocó una fuerte oleada inflacionaria, que, a su vez, llevó a un colapso significativo en el mercado de valores.
El paralelismo con la actualidad está en el rápido aumento de los tipos de interés, aunque el contexto es diferente.
A pesar de las tensiones geopolíticas recientes en Medio Oriente, los precios del petróleo han sido relativamente estables en comparación con 2022 y, más importante aún, la inflación en EE.UU. ha comenzado a mostrar signos de desaceleración.
En lugar de una escalada inflacionaria, como la que se vivió en los años 70, la tendencia actual sugiere una moderación. Sin embargo, los aumentos de tipos siempre implican riesgos para los mercados, dado su impacto negativo en el crédito y la inversión.
El “Melt-Up” del S&P 500: ¿Sostenible o una Burbuja en Formación?
Por otro lado, mientras los tipos de interés suben, el mercado de acciones ha seguido una trayectoria alcista que pocos esperaban. El término “melt-up” se refiere a un aumento impulsivo en los precios de las acciones que no necesariamente se basa en fundamentos sólidos, y que suele preceder a una corrección abrupta. El S&P 500 ha crecido un 40% desde octubre de 2023, una cifra impresionante que solo ha ocurrido 15 veces en los últimos 95 años.
Aunque el ascenso ha generado entusiasmo, los expertos advierten sobre los riesgos que conlleva. Las valoraciones actuales, medidas por el ratio Shiller PE, se sitúan en torno a 37, un nivel históricamente alto. La última vez que vimos este tipo de múltiplos fue en 1999, justo antes del estallido de la burbuja de las puntocom, y en 1929, antes del colapso de la Gran Depresión.
Riesgos a Largo Plazo: Valuaciones y Perspectivas de Rentabilidad
Un Shiller PE Ratio alto suele indicar menores retornos en los próximos 10 años. De hecho, tras las burbujas de 1929 y 2000, los mercados experimentaron caídas significativas y retornos negativos para los inversionistas de largo plazo.
La lección aquí es clara: los altos múltiplos actuales no auguran un buen pronóstico para los que adopten una estrategia de “comprar y mantener”.
En cambio, la selección de acciones basada en un análisis técnico y una gestión activa del riesgo será crucial en los próximos años. A pesar de las valoraciones extremas, algunos factores sugieren que el “melt-up” podría continuar, al menos en el corto plazo.
Las compañías del S&P 500 están más rentables que nunca, con márgenes de ganancia que han pasado del 6-7% en los años 80 al 10% en la actualidad. Esta mejora en la eficiencia corporativa, impulsada por el auge tecnológico, ha permitido que las empresas mantengan valoraciones altas por más tiempo. Incluso el S&P 500 de igual ponderación AMEX:RSP muestra un notable crecimiento en las últimas dos décadas. +36% desde su último mínimo en octubre de 2023.
¿Una Nueva Normalidad para las Valuaciones?
Si bien las valuaciones actuales parecen insostenibles a largo plazo, hay quienes argumentan que el mercado de hoy no debería valorarse con los mismos criterios que en los años 70 o 80.
La productividad y los márgenes de beneficio de las empresas han crecido sustancialmente, lo que podría justificar un nuevo promedio en los múltiplos del mercado, alrededor de 20 veces los beneficios. Sin embargo, las valoraciones actuales, cercanas a 40 veces, duplican ese nivel, lo que sigue siendo difícil de justificar, especialmente ante el riesgo de una recesión inminente.
Conclusión: El Equilibrio entre Riesgo y Oportunidad
El escenario actual es complejo. Por un lado, la subida de los tipos de interés podría enfriar el mercado de acciones, especialmente si continúa la tendencia alcista en los rendimientos de los bonos del Tesoro. Por otro lado, el “melt-up” del S&P 500 podría seguir adelante si las ganancias corporativas mantienen su tendencia ascendente y los márgenes de beneficio no se ven afectados por una recesión.
En resumen, los inversores deben estar atentos tanto a los movimientos de los tipos de interés como a la salud de los márgenes corporativos. Las estrategias activas y la gestión del riesgo serán clave para navegar en este entorno incierto.