Nivel y cobertura de la deuda
El nivel de endeudamiento y la cobertura de la deuda son parámetros importantes para evaluar los resultados financieros y el riesgo de una empresa. Ayudan a comprender la facilidad con la que una empresa puede utilizar su flujo de caja libre o la cantidad de efectivo para cubrir sus obligaciones anuales de intereses y principal. El flujo de caja libre es el efectivo que una empresa genera a partir de sus operaciones después de deducir los gastos de capital. Representa el efectivo que una empresa puede utilizar para diversos fines, como el pago de dividendos, la recompra de acciones o la reducción de la deuda.
El nivel de endeudamiento de una empresa es el importe total de la deuda que tiene con sus acreedores, como bancos, obligacionistas o proveedores. La deuda puede clasificarse en deuda a corto y a largo plazo, dependiendo de la fecha de vencimiento de las obligaciones. La deuda a corto plazo vence en el plazo de un año, mientras que la deuda a largo plazo vence después de un año. La deuda también puede clasificarse en garantizada y no garantizada, dependiendo de si el acreedor tiene un derecho sobre los activos de la empresa en caso de impago. La deuda garantizada está respaldada por una garantía, como propiedades o equipos, mientras que la deuda no garantizada no lo está.
La cobertura de la deuda de una empresa es la relación entre su flujo de caja libre y el servicio total de su deuda, que es la suma de los pagos de intereses y principal de su deuda. La cobertura de la deuda mide cuántas veces puede una empresa pagar sus obligaciones de deuda con su flujo de caja libre. Un ratio de cobertura de deuda más alto indica que una empresa dispone de más flujo de caja libre para pagar su deuda y, por tanto, tiene menos riesgo de impago. Un coeficiente de cobertura de la deuda más bajo indica que una empresa tiene menos flujo de caja disponible para pagar su deuda y, por tanto, un mayor riesgo de impago.
Comparar la deuda con el efectivo es otro indicador esencial para medir la capacidad de una empresa para pagar la deuda con efectivo. El efectivo es el activo más líquido que tiene una empresa y puede utilizarse para pagar las obligaciones de deuda de forma rápida y sencilla. Un alto nivel de efectivo en relación con la deuda indica que una empresa tiene una mejor salud financiera y una menor probabilidad de impago de sus préstamos. También implica que una empresa tiene más flexibilidad financiera y puede endeudarse más si es necesario. Un nivel bajo de efectivo en relación con la deuda indica que una empresa tiene una peor salud financiera y una mayor probabilidad de impago de sus préstamos. También implica que una empresa tiene menos flexibilidad financiera y puede tener problemas de liquidez si no puede generar suficiente efectivo con sus operaciones o conseguir fondos de fuentes externas.
El nivel de endeudamiento y la cobertura de la deuda no son medidas estáticas y pueden cambiar con el tiempo en función de los resultados operativos de una empresa, sus decisiones de inversión, sus actividades de financiación y las condiciones del mercado. Por lo tanto, es importante que los inversores y acreedores supervisen periódicamente estos parámetros y los comparen con las referencias del sector y las tendencias históricas para evaluar la situación financiera y el perfil de riesgo de una empresa.