El índice S&p 500 se encuentra en el punto donde retrocedió en junio, luego del rally alcista iniciado a finales de marzo tras la caída general del mercado. En aquel momento, el índice retrocedió cerca de 10% y avivó los temores por una nueva caída en los mercados que pudiera hacer un nuevo bajo.
Sin embargo, se mantuvo oscilando un tanto de manera lateral antes de retomar una inclinación positiva pero menos acelerada. El precio se ubica ligeramente por debajo de dicho punto y a partir de aquí se presentan dos posibles escenarios:
1) un cruce por encima de este nivel podría llevar al precio sobre el máximo histórico.
2) un nuevo fallo, por el contrario podría enviar al precio nuevamente sobre los 3.000 puntos y quedarse oscilando de manera lateral entre este rango por un periodo más.
La amplitud del mercado (breadth) continúa fortaleciéndose, con porcentajes de participantes por encima de sus medias móviles de 20, 50 y 200 periodos de 78%, 79% y 49,9% respectivamente. Por lo que el escenario 1 pareciera tener mayor probabilidad de éxito.