Los números están bailando y no puedo evitar pensar en el legendario 'Big Short'. La economía está en ebullición y el S&P 500 tiembla. Los expertos están analizando minuciosamente, y con razón.
Echemos un vistazo al pasado. Hubo caídas monumentales que hicieron temblar a todos. ¿Recuerdas el 'Crack de 1929'? Fue una pesadilla de 33 meses, y el S&P 500 se desplomó en un increíble 86%. La culpa, según los gurús de JP Morgan, fue del "apalancamiento excesivo" y la "exuberancia irracional". ¡Una mezcla explosiva!
Luego está el 'Ajuste de la Fed de 1937', con una caída del 60% en 63 meses. ¿La causa? Alguien activó el botón de "ajuste monetario prematuro" y el caos se desató.
No olvidemos el 'Crack tras la II Guerra Mundial', un mercado bajista de 37 meses y una caída del 30% en el S&P 500. Tiempos turbulentos, no hace falta decir por qué.
Hablemos de movimientos bruscos. El 'Flash Crash de 1962' dejó a todos boquiabiertos. En solo siete meses, el S&P 500 perdió un 28% debido a la crisis de los misiles de Cuba. Imagina la tensión.
Pero espera, la lista continúa: el 'Crack tecnológico de 1970', la crisis del petróleo de 1973, el ajuste Volcker, el 'crack de 1987', la burbuja tecnológica y la crisis financiera mundial. ¡Una montaña rusa de altibajos!
En números, la mediana de las correcciones del S&P 500 es de un abrumador -42%. Una cifra para asimilar.
Llegamos al presente. Analistas hablan de una posible caída del 46%. ¡El 'Big Short' podría hacerse realidad! Los factores macroeconómicos están sacudiendo a Estados Unidos y eso no pasa desapercibido.
Pero no todo es negativo. Hay un panorama más optimista con una caída del 18-20%. ¿Tan mal no suena, verdad? El tiempo dirá cómo se desenreda este enigma económico. Mientras tanto, asegura tu cinturón y prepárate para una posible caida.