Un triángulo simétrico es un patrón de precios que se puede formar en cualquier mercado y marco de tiempo, que se caracteriza por estar formado por dos líneas de tendencia convergentes que conectan una serie de máximos y mínimos secuenciales. Estas líneas de tendencia deben converger en una pendiente aproximadamente igual. Si las líneas de tendencia en cambio convergen en pendientes desiguales, entonces el patrón gráfico que se forma es una cuña ascendente, cuña descendente, triángulo ascendente o triángulo descendente.
Representa un período de consolidación del mercado antes de que el precio se vea forzado a realizar un rompimiento alcista o un rompimiento bajista.
El patrón triángulo simétrico es una formación de precios bastante conocido entre los analistas técnicos, que generalmente se forma durante una tendencia y actúa como un patrón de continuación. Aunque en realidad el precio puede romper el patrón en cualquier dirección (al alza o a la baja) y no existe una forma clara de predecir la dirección en que ocurrirá la ruptura, las investigaciones han demostrado que los triángulos simétricos se resuelven (el precio rompe la formación) abrumadoramente en la dirección de la tendencia general del mercado. Teniendo esto en cuenta, los triángulos simétricos (en mi opinión) son excelentes patrones para operar y pueden usarse como patrones de continuación de la tendencia, teniendo en cuenta lo dicho anteriormente.
Este patrón de precios está formado por al menos dos máximos más bajos y dos mínimos más altos. Cuando estos puntos están conectados, las líneas convergen a medida que se extienden y el triángulo simétrico toma forma. También podemos ver esta formación como una cuña en contracción, amplia al principio y que se estrecha con el tiempo.
Representa un período de consolidación del mercado antes de que el precio se vea forzado a realizar un rompimiento alcista o un rompimiento bajista.
El patrón triángulo simétrico es una formación de precios bastante conocido entre los analistas técnicos, que generalmente se forma durante una tendencia y actúa como un patrón de continuación. Aunque en realidad el precio puede romper el patrón en cualquier dirección (al alza o a la baja) y no existe una forma clara de predecir la dirección en que ocurrirá la ruptura, las investigaciones han demostrado que los triángulos simétricos se resuelven (el precio rompe la formación) abrumadoramente en la dirección de la tendencia general del mercado. Teniendo esto en cuenta, los triángulos simétricos (en mi opinión) son excelentes patrones para operar y pueden usarse como patrones de continuación de la tendencia, teniendo en cuenta lo dicho anteriormente.
Este patrón de precios está formado por al menos dos máximos más bajos y dos mínimos más altos. Cuando estos puntos están conectados, las líneas convergen a medida que se extienden y el triángulo simétrico toma forma. También podemos ver esta formación como una cuña en contracción, amplia al principio y que se estrecha con el tiempo.