Peso Chileno Registra Recuperación Adicional El peso chileno ha mostrado una mejoría en las últimas jornadas, operando con ganancias frente al dólar estadounidense y recuperándose de mínimos plurianuales. Esta apreciación, que suma dos jornadas consecutivas al alza con un incremento del 0.8% para el CLP durante la jornada del martes, se produce en un contexto de volatilidad global marcado por las declaraciones sobre política comercial del presidente Trump y la publicación de datos económicos de relevancia.
Uno de los factores que inicialmente impulsó esta tendencia positiva fue la especulación sobre una posible suavización de los aranceles por parte de la administración Trump, lo que debilitó momentáneamente al dólar. Sin embargo, la rápida desmentida de estas informaciones por parte del propio mandatario reavivó la incertidumbre en los mercados, generando volatilidad y poniendo a prueba la fortaleza del peso. La política comercial de Estados Unidos sigue siendo un factor determinante para las monedas emergentes, y el peso chileno no es la excepción.
A pesar de la turbulencia externa, la economía chilena exhibe fundamentos positivos que han apoyado a la apreciación del peso. El balance comercial de Chile superó con creces las expectativas, registrando un superávit de 2.390 millones de dólares, la cifra más alta en un año. Este resultado positivo se debe en gran medida al dinamismo del sector exportador, que alcanzó los 9.422 millones de dólares, impulsado principalmente por los envíos de cobre. Las exportaciones del sector minero crecieron un 8.9%, destacando el cobre con un alza del 12.8%, la plata con un impresionante 103.5% y el oro con un 45.6%. El sector agrícola, forestal y pesquero también contribuyó significativamente con un aumento del 103%, sobresaliendo las exportaciones de frutas con un 105%.
Las importaciones, por su parte, mostraron un crecimiento del 14.6%, alcanzando los 7.032 millones de dólares, lideradas por bienes intermedios, de consumo y de capital, lo que refleja una actividad económica interna robusta. Este superávit comercial, el mayor en casi un año, muestra una resiliencia de la economía chilena y disipa relativamente los temores de un anémico desarrollo económico.
Sin embargo, persisten ciertos riesgos que podrían moderar el optimismo. La publicación de las cifras de inflación podría influir en el comportamiento del mercado cambiario. Si la inflación continúa su trayectoria descendente, el Banco Central de Chile podría verse incentivado a continuar con los recortes de tasas de interés, lo que podría disminuir el atractivo del peso para los inversionistas. La trayectoria de la inflación será crucial para determinar la dirección del peso en el corto plazo.
En el horizonte cercano, la atención también se centra en la publicación de datos económicos clave en Estados Unidos y las minutas del FOMC. Datos económicos sólidos en la economía norteamericana podrían reforzar una postura más agresiva por parte de la Reserva Federal en 2025, ejerciendo presión sobre el peso chileno. Por el contrario, datos débiles podrían debilitar al dólar, generando un viento de cola favorable para la moneda chilena.
En definitiva, el peso chileno se encuentra en una encrucijada, navegando entre factores externos volátiles y fundamentos internos positivos. El comportamiento de la moneda en las próximas semanas dependerá en gran medida de la evolución de estos factores.