Los reguladores estadounidenses aprueban la planta de GNL de Luisiana a pesar de las objeciones climáticas
Los reguladores federales aprobaron el jueves un proyecto de gas natural licuado en Luisiana que ha sido un pararrayos para los activistas medioambientales y una prueba de fuego en política energética para la administración del Presidente Joe Biden.
La Comisión Federal Reguladora de la Energía (FERC) votó 2-1 a favor de permitir la construcción y explotación de la planta de GNL Calcasieu Pass 2 y de un gasoducto conexo de 85 millas de longitud (137 km). La comisaria saliente de la FERC, Allison Clements, emitió el voto discrepante.
"Estos proyectos producirán enormes emisiones de gases de efecto invernadero, equivalentes a la puesta en circulación de más de 1,8 millones de nuevos coches de gas al año", declaró Clements.
La multimillonaria planta de exportación propuesta por Venture Global LNG suministraría 20 millones de toneladas métricas al año del gas superfrío a clientes de Europa, Japón, China y a exportadores estadounidenses.
"Este proyecto será fundamental para la seguridad energética mundial y para apoyar la transición energética, además de proporcionar puestos de trabajo y crecimiento económico en Luisiana y Estados Unidos", declaró Venture Global en un comunicado tras la votación.
Los ecologistas han criticado el proyecto, afirmando que afianzaría el uso de combustibles fósiles que emiten toneladas de contaminación a las comunidades circundantes al tiempo que agravan el calentamiento global. La aprobación de la FERC despeja el camino para que Venture Global, con sede en Alexandria (Virginia), se convierta en el segundo mayor exportador estadounidense de GNL , por detrás de Cheniere Energy 
LNG. La empresa tiene dos plantas en funcionamiento o en desarrollo en Luisiana y aspira a construir 100 millones de toneladas de GNL en el futuro.
La planta es la primera que obtiene una autorización de construcción desde que en enero la administración Biden puso en pausa los futuros permisos de exportación de GNL para revisar las implicaciones económicas y medioambientales. Se espera que esta revisión concluya después de las elecciones presidenciales de noviembre.
El activista medioambiental Bill McKibben calificó la aprobación de la FERC de parodia para la ciencia y la justicia medioambiental, señalando que éste ha sido el verano más caluroso de la historia de la humanidad.
"Esto subraya lo crucial y valiente que puede llegar a ser la decisión de Biden de suspender los nuevos permisos. Ahora es la única defensa contra lo indefendible", afirmó McKibben, Schumann Distinguished Scholar del Middlebury College.