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El dólar apunta a un descenso semanal, mientras los inversores esperan menores alzas de la Fed

El dólar estadounidense se acercaba el viernes a un mínimo de tres meses y se encaminaba a una caída semanal, en un momento en que la perspectiva de que la Reserva Federal ralentice el endurecimiento de la política monetaria tan pronto como en diciembre preocupó a los inversores y mantuvo el ánimo alcista.

La negociación fue escasa durante la noche debido a la festividad del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos, aunque la debilidad del dólar seguía en el punto de mira.

La libra esterlina GBPUSD avanzaba más de un 0,5% durante la noche y se situaba en 1,2103 dólares, cerca de su máximo de más de tres meses de 1,2153 dólares alcanzado en la sesión anterior y en camino de una ganancia semanal de casi un 2%.

El dólar australiano AUDUSD subía a 0,6765 dólares y apuntaba a una ganancia semanal de más del 1%.

El euro EURUSD ganaba un 0,02%, a 1,0413 dólares, acercándose al máximo de más de cuatro meses de 1,0481 dólares alcanzado la semana pasada.

"Seguimos teniendo el tercer día consecutivo de apetito de riesgo. (...) Creo que eso está presionando al dólar estadounidense de manera casi generalizada", dijo Ray Attrill, jefe de estrategia de divisas del National Australia Bank.

Las actas de la reunión de la Reserva Federal de noviembre, publicadas a principios de esta semana, mostraron que una "mayoría sustancial" de los responsables de la política monetaria estaba de acuerdo en que "probablemente sería apropiado" ralentizar pronto el ritmo de las subidas de los tipos de interés, comentarios que hicieron caer al dólar.

Las agresivas subidas de tipos de la Reserva Federal y las expectativas del mercado sobre hasta dónde podría llegar el banco central han sido un gran motor del aumento del 10% del dólar en DXY este año.

Frente a una cesta de divisas, el índice del dólar DXY se situaba en 105,83, poniendo a prueba el mínimo de tres meses de 105,30 alcanzado la semana pasada. Ha bajado más de un 1% en la semana.

También ayudó al apetito de riesgo una encuesta que mostró que la confianza empresarial alemana aumentó más de lo esperado en noviembre.

Aparte de la Fed, las actas de la reunión de octubre del Banco Central Europeo publicadas durante la noche mostraron que los responsables de política monetaria temen que la inflación se esté afianzando en la zona euro. Aunque el BCE se comprometió firmemente a realizar nuevas subidas de tipos, los mercados esperan ahora un movimiento más modesto, de 50 puntos básicos, en la reunión de diciembre.

"Tenemos las cifras de inflación de la zona euro la semana que viene, así que creo que van a ser una gran prueba para los precios del mercado. (...) Si tuviéramos otra sorpresa al alza, creo que eso volvería a poner 75 puntos básicos en la agenda", dijo Attrill.

Por otra parte, el yen japonés USDJPY cotizaba a 138,635 por dólar, tras subir un 0,7% durante la noche.

Los precios de consumo subyacentes en la capital japonesa avanzaban en noviembre a su ritmo anual más rápido en 40 años, superando el objetivo del 2% del banco central por sexto mes consecutivo, según datos del Gobierno.

El dólar neozelandés NZDUSD descendía un 0,1%, a 0,6257 dólares, pero seguía cerca de su máximo de tres meses alcanzado en la sesión anterior.

El "kiwi" (divisa neozelandesa) aspiraba a una ganancia semanal de más del 1,5%, ayudado por la subida de tipos de 75 puntos básicos del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda esta semana y sus perspectivas agresivas de los tipos de interés.

En China, los mercados también siguieron de cerca el esperado recorte del coeficiente de reservas obligatorias de los bancos.

Los medios estatales citaron una reunión del gabinete en la que se dijo que China utilizará recortes oportunos en el coeficiente de reservas obligatorias de los bancos, junto con otras herramientas de política monetaria, para mantener una liquidez razonablemente amplia.

"Creemos que es probable que el Banco Popular de China recorte el coeficiente de reservas obligatorias en 25 puntos básicos para la mayoría de los bancos en las próximas dos semanas (o incluso días)", dijeron analistas de Nomura.

"Dicho esto, es probable que el coeficiente de reservas obligatorias sólo tenga un impacto positivo limitado, ya que creemos que el verdadero obstáculo para la economía reside en la aplicación más celosa de las restricciones del COVID-19 por parte de los responsables locales, más que en la insuficiencia de fondos prestables".

El yuan chino del mercado internacional USDCNH cotizaba a 7,1625 por dólar y se encaminaba a una pérdida semanal, en un momento en que la preocupación por el COVID-19 sigue pesando.

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