Finalmente la Reserva Federal se decantó por bajada de tipos de 0,50%, o sea que se decantaron por la Opción más agresiva, de las que comentábamos ayer. Esto denota que buscan impactar en la economía de forma más agresiva que lo esperado y, por tanto, buscan rebajar la tensión del desempleo, pero con ello también descuidan la inflación a corto plazo.
Tendremos que ver el resultado final de estos datos y su impacto en la evolución de los precios de los activos de renta variable y en las próximas referencias macroeconómicas.
En el gráfico vemos que los precios superaron niveles de resistencia de corto plazo y máximos anteriores, lo que comentábamos en el análisis de ayer que debería ocurrir.
El problema que seguimos viendo es que sigue sin haber dinero comprador, simplemente hemos visto un quite de papel (dinero vendedor) y eso se ve reflejado en el volumen de contratación.
Si hubiera un interés real por los impulsos y superación de niveles de resistencia, tendríamos que ver un acompañamiento en el volumen de contratación con crecimiento en el mismo, pero no está ocurriendo así. Vemos que los precios suben y el volumen sigue siendo decreciente.
Esto quiere decir que hay una divergencia bajista por volumen y se debería traducir en recortes en los precios del activo en cuestión.
Si no vemos un importante incremento de volumen en las próximas sesiones, tendremos un problema en el corto y medio plazo.