El par de divisas Euro (EUR) sigue bajo presión frente al Dólar estadounidense (USD) y la Libra Esterlina (GBP), impulsado por los datos revisados de inflación de Francia para septiembre. La inflación mensual de los precios al consumo en Francia cayó un -1.3%, superando la estimación inicial de -1.2%, lo que refuerza los indicios de una desaceleración en los precios al consumo en la Eurozona.
Además, la tasa de inflación anual de Francia se redujo del 1.5% inicial al 1.4%, situándose claramente por debajo del objetivo del 2.0% que persigue el Banco Central Europeo (BCE). Estos datos son significativos, ya que debilitan aún más la postura del Euro y alimentan las expectativas de que el BCE mantenga una política monetaria más acomodaticia en su próxima reunión de mañana jueves.
Ante este panorama, el Euro se enfrenta a una mayor presión bajista, ya que los mercados anticipan la posibilidad de que el BCE opte por un enfoque más moderado, lo que podría contrastar con la postura más restrictiva de otros bancos centrales, como la Reserva Federal de EE.UU. y el Banco de Inglaterra. La reducción de la inflación en Francia también pone de relieve los desafíos económicos que enfrenta la Eurozona en su lucha por alcanzar una inflación más sostenible.
Este contexto aumenta la presión sobre el Euro, que podría seguir debilitándose frente al Dólar y la Libra, especialmente si el BCE opta por no endurecer su política monetaria en las próximas reuniones.
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