La criptomoneda nro 1 pegó un fuerte salto para cerrar la semana anterior, y si bien faltan confirmaciones comienza a tomar un tono interesante..
En la idea de fines de noviembre planteábamos la importancia de un potencial soporte dinámico, cuyo sostenimiento era crucial principalmente para que quede vigente al menos una referencia que permitiera pensar que el movimiento de largo plazo sigue alcista a pesar de los desplomes de 2022, y sobre todo porque la vigencia de esa zona alimentaba la chance de que lo peor ya había pasado.
Bien, luego de quedar prácticamente adormecido contra esa zona de soporte desde comienzos de noviembre hasta la semana pasada, el activo tuvo un arranque feroz para cerrar la mejor semana desde el año 2021. En esa suba logró la superación de los 19500 dólares que pasan a ser la zona más cercana de control y cuyo sostenimiento sería la señal de que lo peor ya pasó.
Por otro lado, para quedar verdaderamente liberado al alza, está pendiente la superación de los 22500, ya que por la dinámica alcista de su momento, por encima de ese valor el precio no formó soportes o resistencias hasta los 30 mil dólares, y sería ese el objetivo habilitado una vez superado el mencionado al comienzo del párrafo.
Sin dudas viendo el volumen operado de junio 2022 en adelante, y si bien no fue en esa fecha el piso pero si bajó considerablemente el ritmo de la caída, tenemos elementos para pensar que se trató desde ese entonces de una formación de piso de largo plazo, y sostenemos esa idea mientras no perdamos los 19500 dólares, teniendo claro que el soporte crítico son los 16500.
Para ver continuidad alcista lo ya dicho, pasar 22500 es la condición necesaria para abrir un escenario donde podemos esperar el cambio de decena de mil.