Las acciones de la empresa petrolera han perdido más de 50% de su valor en lo que llevamos de año y hoy reportó su tercer trimestre consecutivo de pérdidas, dado que la baja demanda producida por el Coronavirus sigue pesando sobre las operaciones de la compañía. Tanto las cifras de ingresos como las pérdidas por acción fueron mejor que lo que el mercado esperaba, mejorando las cifras en relación al trimestre anterior, pero muy por debajo de las cifras de 2019.
Por otro lado, la empresa también mencionó en la semana que tiene planeado reducir su personal estadounidense en alrededor de 1.900 empleados, y que las reducciones de la fuerza laboral global podrían aumentar hasta un 15%. Además, a pesar de que la compañía ha reiterado en muchas ocasiones que el pago de dividendos es primordial para la gerencia, (el miércoles mantuvo su dividendo mientras otras compañías lo han reducido o eliminado), es el primer año desde 1982 que no ha aumentado su pago a los accionistas.
Desde inicios de junio la acción viene negociándose en un canal bajista, siguiendo a la tendencia general del mercado petrolero que ha venido debilitándose. Actualmente el precio de la acción se encuentra por debajo de su promedio móvil de 50, 100 y 200 días, y además está muy cerca de alcanzar sus mínimos del año, que a la vez es su valor más bajo desde 2002.
Desde inicios de octubre el precio se ha encontrado entre el nivel P y el nivel S1 de los puntos pivotes, pero el entorno actual hace más probable que la empresa llegué a tocar nuevamente su mínimo antes de recuperarse y quebrar la banda superior del canal bajista.
Por otro lado, la empresa también mencionó en la semana que tiene planeado reducir su personal estadounidense en alrededor de 1.900 empleados, y que las reducciones de la fuerza laboral global podrían aumentar hasta un 15%. Además, a pesar de que la compañía ha reiterado en muchas ocasiones que el pago de dividendos es primordial para la gerencia, (el miércoles mantuvo su dividendo mientras otras compañías lo han reducido o eliminado), es el primer año desde 1982 que no ha aumentado su pago a los accionistas.
Desde inicios de junio la acción viene negociándose en un canal bajista, siguiendo a la tendencia general del mercado petrolero que ha venido debilitándose. Actualmente el precio de la acción se encuentra por debajo de su promedio móvil de 50, 100 y 200 días, y además está muy cerca de alcanzar sus mínimos del año, que a la vez es su valor más bajo desde 2002.
Desde inicios de octubre el precio se ha encontrado entre el nivel P y el nivel S1 de los puntos pivotes, pero el entorno actual hace más probable que la empresa llegué a tocar nuevamente su mínimo antes de recuperarse y quebrar la banda superior del canal bajista.