Si estoy solo tú me acoges eres mi fiel compañía Me hablas sincera y me esperas cuando empieza el día Mi guía, mi faro de Alejandría, si me ves perdido Te miro y elimino la tristeza en un suspiro
Das sentido a mi existencia, tú, desobediencia Tú, sola presencia merece mi reverencia Tú, me diste un don, fuiste mi espada Siempre encerrada en tu prisión si la inspiración faltaba
Desde la nada me abrazas, no prohíbes ni amenazas Tan romántica y auténtica, tú nunca te disfrazas autor: nach